Basta de hombres presidentes. Entrevista a Gabriel Lerner

(Extracto) – Fuente: The International Literary Quarterly (interlitq.org)

Basta de hombres presidentes. Entrevista a Gabriel Lerner

“Esperan que la Corte Suprema decida que Trump siga siendo presidente”, afirma Gabriel Lerner, editor en jefe del diario La Opinión de Los Ángeles, debido a la elección unilateral de la nueva jueza, pocos días antes de las elecciones presidenciales. El futuro de las potencias, la importancia de la mujer en altos cargos jerárquicos, los latinos y sus lazos con Argentina: “…la comida, el fútbol, el mate y la memoria histórica del momento…” .

 

A pesar de la distancia ¿llevás a la Argentina en tu corazón? 

Sí, llevo a la Argentina en mi corazón, pero eso quiere decir a la selección de fútbol, que para mí significó llanto en las dos últimas finales, a pesar de que en el año ‘72 me fui a vivir a Israel durante mucho tiempo y luego me trasladé a los Ángeles. Si lo divido por años, soy un tercio de cada lugar. Pero el lenguaje, la cultura, la memoria, mis gustos culinarios son argentinos.

Cuando puedo hago asado en casa. Estuve casado con una chilena durante muchos años, ahora no lo estoy, pero eso significó un asado totalmente diferente, con mariscos y pollo. Entonces llevo la comida, el fútbol, el mate, la memoria histórica del momento en que me fui, pero no la política actual. Si me nombrás cualquier político en este momento no lo conozco, no tengo idea. Me fui poco antes del inicio de la represión por parte de los militares, pasé toda esa etapa generalmente afuera, pero la viví bastante de cerca personalmente, y eso me quedó, el conocimiento de ciertas personas que estuvieron en esa época. Falleció un amigo mío que era como un hermano, el teniente coronel del Ejército Argentino, y por otra parte, obvio que mucha más gente cercana que estuvo del otro lado y que cayó. Entonces mis lazos con Argentina son esos, aparte de escribir y leer.

¿Considerás que los latinos radicados en Estados Unidos vivencian problemas de identidad cultural?

En Estados Unidos no frecuento la comunidad argentina ni la comunidad israelita. Mi señora es gringa, habla español, pero es de acá y mi vida profesional es en torno a los latinos. En los Ángeles cuando decís latinos son 80 por ciento mexicanos, 19 por ciento salvadoreños y el resto todos los demás. Hay una tendencia a decir nosotros los latinos o nosotros los hispanos, y me incluyo, de ahí nació el sitio HispanicLA. Pero en realidad, si te vas al estado de Florida, la constitución de los latinos es totalmente diferente, el entorno cultural es distinto, ni hablar de las opiniones políticas, de la comida, de la manera de vivir. Me acostumbré a la vivencia mexicana americana, es diferente, porque son personas que en cualquier momento se vuelven a su país y luego regresan, entonces no echan raíces como nosotros, o por lo menos como en mi caso.

El mexicano siempre tiene la opción de volver a su país de origen, entonces pasa generaciones hasta que se siente desconectado de México, se olvida del español, cambia políticamente, cambia culturalmente y también, económicamente. Pero la mayoría de la gente que conozco que se considera latina o mexicana son trabajadores, personas que vinieron con una mano adelante y otra atrás, llegaron pobres, sin nada, y lo único que buscaban era tener la heladera llena de comida, porque era lo que le faltaba, así me respondió una vez un muchacho. Ese es uno de los orgullos que tienen, y el otro es comprarse una camioneta último modelo que le dicen troca del año, el lenguaje que se usa es truck convertido en troca, llenarla de regalos y regresar a su pueblo en México manejando, pasando por la frontera y mostrando lo exitoso que es uno aquí. Entonces, es muy interesante esa vivencia, a través de mi trabajo logré conocerla políticamente, y a través de mi vida logré conocerla personalmente.

 

No más apoyo bipartidista

¿Qué opinás de Amy Coney Barrett como miembro de la Corte Suprema? 

Justo escribí una editorial sobre ese tema. Hay mucho para hablar de la situación política actual con este nombramiento, no alcanzan los días para hacerlo, significa un cambio en la composición de la Corte Suprema, porque a partir de ahora no habrá dictámenes de 5-4. Hasta ahora, siempre había un juez que era el fiel de la balanza, a veces se inclinaba para el grupo de los conservadores y otras veces para el grupo de los liberales, así le llamamos a la división entre izquierda y derecha.

En los últimos años, el fiel de la balanza era John Roberts, presidente de la Corte Suprema. A pesar de que sus opiniones son muy conservadoras, a veces se inclinaba para votar por los liberales, para no convertirse en un instrumento del Poder Ejecutivo. Lo que sucede ahora, es que la Corte Suprema, durante el lapso que lleve la presidencia de Donald Trump, pasa a ser un brazo del Poder Ejecutivo, va a hacer lo que se le solicite. Con una mayoría de 6-3, aguantan que uno disienta y siguen siendo mayoría. ¿Qué es lo que va a cambiar?, temas que son muy importantes para los estadounidenses y van a cambiar de manera muy rápida. Se va a decidir el destino sobre la Ley de Cuidados de Salud Asequibles (conocida como Obamacare). El Partido Republicano ha intentado anularla. Están asegurados a bajos costos alrededor de 20 o 30 millones de personas.

Dentro de poco va a haber una decisión contra el derecho de la mujer al aborto, ella ha militado en grupos antiderechos, y va a llevar a que el aborto sea ilegal nuevamente en Estados Unidos. El otro tema, que no inclui en la editorial, es el matrimonio de personas del mismo sexo, que se aprobó hace unos años. Por ahora parece todo normal, pero para ella y para el grupo en el que militaba, religioso, es una aberración. Hasta ahora, había una mayoría de 5-4 en la Corte Suprema para el derecho de los homosexuales a tener una vida normal, pero ella va a lograr que se declare nuevamente ilegal. 

Pero lo más importante o más urgente, es que va a tomar las decisiones sobre estas elecciones que se vienen ahora, por eso se estaba corriendo para la aprobación de su candidatura. El resultado de estas elecciones van a estar entredicho y las van a apelar, la apelación va a ir de juez en juez hasta llegar a la Corte Suprema, y esperan ellos que la Corte decida de que Trump siga siendo presidente. Eso pienso. 

 

El rumbo de las potencias 

¿Cómo pensás el futuro de Estados Unidos si una mujer fuera presidenta? 

Los gringos o estadounidenses, y me considero uno de ellos por mi ciudadanía, hablan mucho de los derechos de la mujer, pero cuando Hillary Clinton fue candidata a presidenta, muchos votaron en contra por su género. No lo reconocen, no lo dicen, pero cuando empezás una discusión y te empiezan a explicar cuales son las características que se necesitan para ser presidente, de a poco van llegando ellos mismos a la conclusión de que no quieren una mujer. 

En última instancia, supongamos que gana Joe Biden que tiene 77 años y que en dos años se retire, mi amiga Kamala Harris se convertiría en presidenta, no sería por elección, sino que automáticamente pasaríamos a tener la primera presidenta mujer, la primera presidenta afroamericana, la primera presidenta jamaiquina, por su origen.

En última instancia no va a cambiar Estados Unidos profundamente porque el sistema sigue siendo el mismo, y si le toca el turno a ella no lo va a cambiar, no es la radical que están tratando de mostrar, sino que políticamente está en el centro. Cuando fue Procuradora General de San Francisco, tomó varias decisiones que se las adjudicaron como racistas y clasistas, lo mismo cuando fue Procuradora del estado de California.

He tenido la oportunidad de haberla conocido, nos hemos encontrado en varias oportunidades, porque en su carrera buscan la aprobación de los medios de comunicación, el endoso, entonces uno tiene las posibilidades de encontrarse con la persona en algún café para conocer su carácter. Personalmente me gustó mucho, me cae muy bien, sería un alivio tener una mujer presidenta.  La situación no va a cambiar pero la sensación va a ser buena. 

¿Cómo imaginas en un futuro a China como el país dominante?  

China es interesante como país, el modo particular que tiene de capitalismo. Los medios de producción, el estado, está todo bajo una sola dirección y, sin embargo, es capitalista, tiene sus multimillonarios, billonarios, y las personas que son dueñas del país. Incluso el partido que está actualmente y va a seguir estando en el poder, el Partido Comunista de China, no tiene nada que ver con la idea de comunismo que algunos de nosotros estudiamos cuando éramos adolescentes. Todo eso le da un poder que no lo tiene Estados Unidos. El dominio del mercado, la cantidad de habitantes que tiene y la posibilidad de manipularlos a través de la producción. Son los mayores productores del mundo del comercio, de mercancías, de artículos que se venden. Es cuestión de tiempo hasta que se note y se acepte su presencia, pero la penetración cultural la sigue teniendo Estados Unidos, el idioma que vamos a hablar y que hablamos además del propio es el inglés. No te imagino a vos, ni a mis hijos, ni a mis futuros nietos hablando en Chino.

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